Doña Reyes, hace algún tiempo yo decía de usted que, desde luego pasará a la historia de la España cañí quién le hizo aquél apercibimiento, pero que a usted la llevará a figurar como autora de de un paso de transformación, en el marco de una transformación global que ya ha comenzado y que exige unas formas de hacer y de comunicar la politica imprescindible para la recuperación de la democracia en su sentido más estricto.
Usted, mi muy admirada y muy querida compañera, ha subvertido el orden en aquellos sagrados recintos dónde se había instalado una determinada concepción de la democracia que degrada a esta.
Recuerdo que yo reconocía que usted tenía (y tiene) la sensibilidad de entender que los procesos son más fuertes que los planes y que la política que no controla los procesos, y que no sabe dirigirlos, no es política ni es ná, es administración y, generalmente, mala administración.
Ellos, los mezquinos, los miserables, al final han conseguido que apague usted su twitter…, o eso se creen ellos.
Doña Reyes, los que la hemos venido observando desde hace algunos años, sabemos, nos consta, que usted nada tiene que ver con la intransigencia y la metodología de la exclusión, tan en boga. Ni se ha permitido un segundo para contemplar la parálisis premeditada que la circundaba. A usted y a otros y otras compañeros y compañeras. La cercanía a la ciudadanía y a sus problemas ha sido un ejercicio habitual en usted, de manual y que se debería de tratar en las escuelas de cuadros y de cargos públicos de cualquier organización que pretenda tener una influencia, aunque sea mínima, en la sociedad, en el debate político.
Usted, ha pretendido abordar con sinceridad y con una generosidad indiscutible los debates de una manera abierta, y ha sido víctima de los obsesionados por el aislamiento, con las prácticas conocidas de manipulación reglamentaria, sufriendo hasta el insulto y el sabotaje. Es usted un peligro para los miserables.
Yo sé que usted, con esa decisión, la de apagar su twitter un ratito, no deserta de nada, como algunos esbirros repetirán aquí y allá. Su compromiso con la izquierda y sus valores es inequívoco y, además, me consta que usted va a promover activamente esa convergencia de las izquierdas que permita ampliar el espacio sin necesidad de recurrir a la tutela mendaz, a la irresponsabilidad y al sectarismo.
Hoy, doña Reyes, hace usted un ejercicio de lealtad a los militantes y a los votantes de su organización haciendo entrega de su escaño en el Parlamento de Madrid y un servicio al pluralismo de la izquierda en su conjunto de la que muchos nos reclamamos.
Yo, soy gallego, no es por presumir, pero lo soy y usted lo sabe, y sé que en cuanto se abra un imparable debate, constituyente de un proyecto de izquierda plural y abierto, usted va a estar y yo también. Ellos, no.
Le reitero a usted mi consideración más distinta, especialmente porque me evitará, en lo sucesivo, tener que aguantar las lonchas de mármol de Carrara, (permítame el exceso cheli, pero pa entendernos), de las sesiones plenarias de la Asamblea de Madrid a través del canal parlamentario.
Un beso de tu amigo y compañero,
Lóis.
Usted, mi muy admirada y muy querida compañera, ha subvertido el orden en aquellos sagrados recintos dónde se había instalado una determinada concepción de la democracia que degrada a esta.
Recuerdo que yo reconocía que usted tenía (y tiene) la sensibilidad de entender que los procesos son más fuertes que los planes y que la política que no controla los procesos, y que no sabe dirigirlos, no es política ni es ná, es administración y, generalmente, mala administración.
Ellos, los mezquinos, los miserables, al final han conseguido que apague usted su twitter…, o eso se creen ellos.
Doña Reyes, los que la hemos venido observando desde hace algunos años, sabemos, nos consta, que usted nada tiene que ver con la intransigencia y la metodología de la exclusión, tan en boga. Ni se ha permitido un segundo para contemplar la parálisis premeditada que la circundaba. A usted y a otros y otras compañeros y compañeras. La cercanía a la ciudadanía y a sus problemas ha sido un ejercicio habitual en usted, de manual y que se debería de tratar en las escuelas de cuadros y de cargos públicos de cualquier organización que pretenda tener una influencia, aunque sea mínima, en la sociedad, en el debate político.
Usted, ha pretendido abordar con sinceridad y con una generosidad indiscutible los debates de una manera abierta, y ha sido víctima de los obsesionados por el aislamiento, con las prácticas conocidas de manipulación reglamentaria, sufriendo hasta el insulto y el sabotaje. Es usted un peligro para los miserables.
Yo sé que usted, con esa decisión, la de apagar su twitter un ratito, no deserta de nada, como algunos esbirros repetirán aquí y allá. Su compromiso con la izquierda y sus valores es inequívoco y, además, me consta que usted va a promover activamente esa convergencia de las izquierdas que permita ampliar el espacio sin necesidad de recurrir a la tutela mendaz, a la irresponsabilidad y al sectarismo.
Hoy, doña Reyes, hace usted un ejercicio de lealtad a los militantes y a los votantes de su organización haciendo entrega de su escaño en el Parlamento de Madrid y un servicio al pluralismo de la izquierda en su conjunto de la que muchos nos reclamamos.
Yo, soy gallego, no es por presumir, pero lo soy y usted lo sabe, y sé que en cuanto se abra un imparable debate, constituyente de un proyecto de izquierda plural y abierto, usted va a estar y yo también. Ellos, no.
Le reitero a usted mi consideración más distinta, especialmente porque me evitará, en lo sucesivo, tener que aguantar las lonchas de mármol de Carrara, (permítame el exceso cheli, pero pa entendernos), de las sesiones plenarias de la Asamblea de Madrid a través del canal parlamentario.
Un beso de tu amigo y compañero,
Lóis.
Nota: Aunque sea con prisas, les dejo un vídeo con una de sus memorables intervenciones contra la corrupción en la Comunidad de Madrid:
Gracias Don Lois, muchas gracias
ResponderEliminarPues sí, y que sea un gallego y un murciano parte de su audiencia en twitter en los plenos de la CAM. Don Lóis descanse, pero para el año que viene vaya preparando la bufanda que volvemos de supporters de Doña Tania.
ResponderEliminarUn beso, Reyes.