Manuel Reyes Mate (Pedrajas de San Esteban, Valladolid, 1942) obtuvo ayer el Premio Nacional de Literatura 2009 en la modalidad de Ensayo por su obra La herencia del olvido, un ensayo sobre el papel político que la memoria juega en nuestro tiempo. «Las sociedades como las nuestras con un pasado dictarial o con una guerra civil no pueden construir su futuro pasando página», aseguró este autor, para quien la memoria es un tema «moral y políticamente, fundamental».
«La memoria ya es imparable. La Ley de la memoria histórica ha sido un primer paso y habrá que dar otros, es inevitable», señaló este autor, doctor en Filosofía por la Universidad Autónoma de Madrid y por la Wilhelms-Universität de Münste y director del Instituto de Filosofía del C.S.I.C.
Su libro La herencia del olvido, seleccionado por el Jurado del Premio Nacional de Ensayo, se centra no en la memoria «no como nostalgia al pasado», sino como «aquella parte oculta del presente sobre la que se reconstruye la historia» y en la que el papel fundamental lo tienen las víctimas, marginados y fracasados.
En esta misma línea, señaló que «tarde o temprano la memoria acabará cobrándose toda su significación» y apostó por continuar con iniciativas gubernamentales como la Ley de la Memoria Histórica y abogó por «hacer justicia a los más de 100.000 desaparecidos de la posguerra».
Mate presidió el Patronato del Instituto de Filosofía del C.S.I.C de 1987 a 1990, y desde entonces es su director, además de trabajar como profesor visitante habitual en universidades europeas y americanas. Su obra se ha construido en torno a dos grandes ejes teóricos: por un lado, la problemática de la filosofía después del Holocausto, campo en el que ha sido pionero en el mundo hispanohablante. Y, por otro lado, la pregunta sobre qué significa pensar en español.
«La memoria ya es imparable. La Ley de la memoria histórica ha sido un primer paso y habrá que dar otros, es inevitable», señaló este autor, doctor en Filosofía por la Universidad Autónoma de Madrid y por la Wilhelms-Universität de Münste y director del Instituto de Filosofía del C.S.I.C.
Su libro La herencia del olvido, seleccionado por el Jurado del Premio Nacional de Ensayo, se centra no en la memoria «no como nostalgia al pasado», sino como «aquella parte oculta del presente sobre la que se reconstruye la historia» y en la que el papel fundamental lo tienen las víctimas, marginados y fracasados.
En esta misma línea, señaló que «tarde o temprano la memoria acabará cobrándose toda su significación» y apostó por continuar con iniciativas gubernamentales como la Ley de la Memoria Histórica y abogó por «hacer justicia a los más de 100.000 desaparecidos de la posguerra».
Mate presidió el Patronato del Instituto de Filosofía del C.S.I.C de 1987 a 1990, y desde entonces es su director, además de trabajar como profesor visitante habitual en universidades europeas y americanas. Su obra se ha construido en torno a dos grandes ejes teóricos: por un lado, la problemática de la filosofía después del Holocausto, campo en el que ha sido pionero en el mundo hispanohablante. Y, por otro lado, la pregunta sobre qué significa pensar en español.
No hay comentarios:
Publicar un comentario